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Aproximación a un esquema Ponzi
En un esquema Ponzi se abusa de la confianza de los inversores, que creen estar recibiendo ingresos extremadamente altos o más altos que los del sistema financiero tradicional, producto de las ganancias del negocio, cuando en realidad se les paga con el dinero de los nuevos socios nuevos inversores. Si se retira un número importante de inversionistas, colapsa el sistema porque no hay forma de devolver el dinero ni mucho menos sus réditos respectivos.
Ahora bien, el operador de un sistema de estos también puede irse con el dinero y las ganancias, terminado el ciclo respectivo.
Cómo funciona un esquema piramidal
En un esquema piramidal por su parte, también se prometen ingresos desproporcionados por afiliarse y traer referidos para que aporten y circulen el efectivo. El esquema colapsa porque requiere un crecimiento exponencial (no aritmético) para poder compensar todas las promesas de ingresos de la red.En algún momento se quedan sin gente que se pueda inscribir y se despedaza el sistema.
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Te ofrecen unos retornos de inversión enormes, que no son sostenibles para ninguna empresa.
Un esquema piramidal o ponzi, en el que inicialmente alegaban usar criptomonedas para su funcionamiento, publicitaron dicho evento por sus redes sociales, sin mencionar al organizador, y como en Venezuela las reuniones sobre criptomonedas son muy poco frecuentes.
El evento se hace en un lujoso hotel de la capital de Venezuela, el mismo sitio donde el gobierno de Venezuela realizó su primer encuentro internacional sobre criptoactivos.
Siempre hacen propaganda exagerada y poca realidad. Este evento, no fue una excepción a esa regla
En la recepción pedían suministrar la dirección de correo electrónico y el número telefónico. Ya en la entrada al salón, se veían varios hombres mayores de 40 años con trajes de vestir y algunas mujeres, de edades similares, bastante arregladas y que parecían vendedoras.
Habia un cartel que hablaba sobre “inversiones con criptomonedas” y el nombre de una empresa que desconocía, diferente a la compañía que promocionó el evento por redes sociales. La mayoría de la audiencia parecía estar por encima de los 35 años.
En Google el nombre de la empresa desconocida (llamémosla Pirámide, nombre escogido al azar). Entre las primeras opciones de búsqueda, apareció un artículo negativo sobre dicha compañía. Entre varios detalles, el “líder” de dicho proyecto era una persona que había estado afiliada a otros ponzi o esquemas piramidales.
Todo parte de un “líder fundador”, quien pide dinero por un bien o servicio poco valioso (criptomonedas fantasmas, educación, productos naturistas, entre otros) y promete grandes ganancias, generalmente absurdas. Lo único es que obliga a los participantes a reclutar gente nueva para que invierta en el sistema. Entonces, con el dinero entrante paga las ganancias prometidas a los participantes iniciales, y promete que los ingresos mejorarán si logran que los nuevos “inversionistas” traigan más personas. Así, van armando los rankings donde los que más han invertido y reclutado ganan más, hasta que ya no hay nuevos inversionistas que quieran entrar al esquema. Luego se agota el flujo de dinero entrante y los últimos que entran perderán todo su dinero. En muchos países es una práctica ilegal, porque no están produciendo nada, solo reciclando el dinero.
Con todo esto, ya pueden reconocer cómo se comporta un esquema piramidal y no solo de criptomonedas. Todos estos esquemas siguen un guion bastante similar, una metodología que solo presenta beneficios, que resultan inexistentes para la gran mayoría de quienes ingresan al esquema
Mi recomendación para que no caigan en esto, es que siempre sigan su sentido común e investiguen. Cuando algo es demasiado bueno para ser verdad, es porque es mentira. En ningún tipo de negocio NADIE, pero absolutamente NADIE, le puede asegurar ganancias tan altas como un 2% diario o 30% mensual y menos sin mencionar los riesgos de que tales ganancias se cumplan o no. También, es notorio comprobar que en ningún momento presentaron números concretos, ni los riesgos de inversión; solo se enfocaron en tocar la emocionalidad de la gente, en vez de explicar con argumentos y lógica el funcionamiento de su sistema.
Cuando se invierte dinero se hace con la cabeza fría, no con el corazón.