Los reguladores sudafricanos buscan ejercer más control sobre el trading de criptomonedas después del colapso de lo que supuestamente es el esquema Ponzi más grande que el país haya visto.
La autoproclamada empresa de trading de Bitcoin (BTC), Mirror Trading International, fue puesta en liquidación provisional en diciembre, ya que los inversores intentaron y no pudieron retirar sus fondos. La compañía afirmó haber atraído más de 260,000 membresías en todo el mundo, manejando 23,000 Bitcoin reportados, una suma que ahora asciende a unos $716 millones de dólares.
El trader “Coin Signals” también enfrenta cargos de la CFTC
Para Jeremy Spence, también conocido como “Coin Signals”, las noticias empeoran.
Un nuevo proyecto de ley de Hawái busca crear un grupo de trabajo blockchain liderado por el estado
La Comisión de Negociación de Futuros de Productos Básicos ha presentado cargos de fraude civil contra Spence por su plan de inversión, que supuestamente engañó a los inversores con más de USD 5 millones en Bitcoin utilizando declaraciones falsas o engañosas.
Sin embargo, una investigación de la Autoridad de Conducta del Sector Financiero (FSCA) reveló que la empresa no llevaba registros contables ni ningún tipo de base de datos de usuarios. La dirección de la empresa afirmó haber sido engañada por el CEO Johann Steynberg, quien, según dicen, pudo haber huido a Brasil.
Los abogados de la administración restante de la compañía enfatizaron que la FSCA aún no había determinado que MTI operaba como un esquema Ponzi, solo que operaba sin licencia.
El jefe de cumplimiento de la FSCA, Brandon Topham, le dijo a Bloomberg que las autoridades judiciales tenían que poder detener tales esquemas antes de que tomaran impulso:
“En el momento en que algo se convierte en un esquema Ponzi, hemos perdido nuestra jurisdicción. Necesitamos que la policía y la fiscalía trabajen rápido y pongan a la gente en la cárcel”.
Con ese fin, la autoridad está haciendo propuestas para regular formalmente el trading de criptomonedas como Bitcoin
Liquidadores buscan ampliar la investigación del presunto esquema de Bitcoin en Sudáfrica
Topham dijo que tratar de entrar temprano en los esquemas Ponzi se había convertido en una práctica bastante común en Sudáfrica:
“He estado en programas de radio donde la gente dice: ‘Soy un inversor Ponzi profesional. Entras rápido y sales y, al igual que con cualquier negocio, tienes que arriesgar dinero para ganar dinero’. Necesitamos hacer un ejemplo de MTI para que la gente entienda que invertir en un Ponzi nunca es una buena idea”.
En julio, la Junta de Valores del Estado de Texas cerró las operaciones de MTI que tenían lugar en su jurisdicción, después de concluir que el proyecto era un esquema de marketing multinivel. Los propios reguladores de Sudáfrica ya sospechaban de las afirmaciones de MTI respecto a que obtendría un beneficio del 10% por mes para cada usuario.
“Se necesitará una investigación seria para determinar cuánto estuvo involucrado”. Otras dos compañías estaban bajo investigación por posibles vínculos con MTI. Hasta ahora, los liquidadores no han podido rastrear todos los activos de la compañía y se espera que se les otorgue una orden de liquidación final ampliada el 1 de marzo, suponiendo que los procedimientos legales sigan sin oposición.
Si bien los gobiernos han coqueteado con la regulación de las criptomonedas durante años, ahora se ven obligados a promulgar leyes concretas debido al creciente perfil de Bitcoin y las criptomonedas asociadas.
En diciembre, el CEO de Coinbase, Brian Armstrong, dijo que el Departamento del Tesoro de los Estados Unidos estaba proponiendo leyes que podrían hacer que los exchanges exigieran un nombre y una dirección física a los usuarios involucrados en cualquier transacción de criptomonedas que superara los $3,000 dólares.