Los accionistas son los hermanos Jordi y Miguel Ángel Alcaraz, familia acaudalada del sector inmobiliario en Cataluña. Como socio minoritario y responsable tecnológico contaban con Joaquim Fenoy, un experto en criptomonedas. En 2015 anunciaban una inminente red de 40 cajeros en España, y aseguraban que su principal mercado de expansión era Grecia, donde decían operar a través de 500 oficinas del Banco del Pireo. En 2016, cuando se descubre el cuento de la lechera, en España solo tenían instalados media docena de cajeros y el negocio griego había sido vendido a una sociedad de Girona llamada Bitcoin Investors Trust. El propietario de esta empresa, Miguel Pavón, también ha sido denunciado por una presunta estafa de 4,6 millones de euros en bitcoins,
Bitchain entró en Grecia de la mano de Chip Chap, una sociedad de Castellón experta en tecnología blockchain que ya operaba en el país heleno. Bitchain decía a los inversores contar con el 30% de las acciones de Chip Chap, aunque en verdad solo tenían el 8%.El juicio oral está en marcha y la acusación pide siete años de cárcel. Los hermanos Alcaraz no han respondido a las preguntas de EL PAÍS. El plan de crecimiento que presentaban los Alcaraz era bueno, permitía doblar los beneficios en medio año, pero la realidad era humo.
Investigados por coacciones
El segundo frente legal demandó a tres los socios de Bitchain por el robo de 24 bitcoins es poca cosa comparado con los 758 bitcoins que Fenoy ha estafado por su cuenta a 81 inversores. De estos, diez clientes perdieron 2 millones de euros en operaciones gestionadas por Fenoy.s.
Apartado de Bitchain cuando la empresa se desmoronaba, Fenoy aprovechó la experiencia griega y se volcó en la intermediación de inversiones españolas en la red de bitcoins de este país. Las cosas se torcieron cuando el diario Ara sacó a la luz las acusaciones contra Fenoy. Este ofrece su versión de los hechos: en diciembre de 2015, una noche tras hacer las compras de Navidad, le robaron los regalos y el ordenador con todos los datos de mensajería de sus clientes en una estación de servicio a las afueras de Barcelona. Añade Fenoy que los bitcoins que gestionaba se vieron comprometidos por el fraude multimillonario del servicio de intercambio BTC-e en Grecia. Solano y otros inversores consultados replican que Fenoy les ha ofrecido múltiples excusas, todas rocambolescas.
Fenoy denunció a Solano y a cinco personas más por secuestro: asegura que el 9 de noviembre de 2017, en la cafetería del Hotel Don Fidel de Zaragoza, fue obligado a subirse a un coche y fue trasladado a Barcelona. En un aparcamiento de la Estación de Sants fue liberado por la Guardia. Solano replica que no hubo secuestro alguno: un grupo de afectados descubrió que Fenoy tenía una reunión con unos inversores y se acercaron para pedirle explicaciones. El juzgado de instrucción número 7 de Barcelona investiga a seis personas por coacciones a Fenoy, según una portavoz judicial. Entre los investigados por coacciones se encuentra Santiago Fuentes, conocido por ser uno de los juzgados en la estafa piramidal de Finanzas Forex, caso en el que finalmente fue absuelto.