Japón es el escenario de la más reciente caída de un presunto esquema de estafa con criptomonedas. Se trata de una plataforma que ofrecía supuestos retornos a la inversión con supuestos criptoactivos, basado en un sistema de trading con inteligencia artificial.
El hecho ocurrió en la prefectura de Aichi, donde fueron capturadas cuatro personas presuntamente vinculadas con la estafa, denominada como una historia de inversión ficticia.
En total, los sospechosos habrían logrado captar unos 6.000 millones de yenes (poco menos de 55 millones de dólares) de más de 20.000 víctimas. Los retornos ofrecidos por el denominado «proyecto Oz» llegaban al 100% sobre el monto invertido.
Según los reportes locales, los capturados son Yukihiro Yamashita, Takuya Hashiyada, Masamichi Toshima y Shoji Ishida. Aunque no lo especifican, este último pareciera ser el de más alto rango dentro del esquema, ya que a él se le atribuyen las ofertas de retorno de inversión, que también incluía multiplicar por 2,5 en solo cuatro meses el dinero depositado.
En cuanto a la captación de las víctimas, se señala que un «encargado de solicitudes» llevó a cabo eventos y reuniones para promover la plataforma e impulsó la creación de un grupo en la red social LINE para ese propósito.
Al parecer, muchos inversionistas captaron a su vez a otras personas, lo que aumentó exponencialmente el alcance de la estafa. Al menos desde septiembre de 2019, personas afectadas por el «proyecto Oz» comenzaron a introducir demandas en la ciudad de Nagoya.
Se desconoce a qué criptomonedas corresponden los fondos sustraídos a los afectados o si, por el contrario, las inversiones se hacían en moneda fíat. Aunque esa información no queda clara en los reportes, parece que se trata del segundo escenario.
Estafas como esta no abundan en la historia de Japón, se arrestó 7 personas vinculadas con el robo de 2 millones de dólares en bitcoin.
En ese caso, la estafa se dio con la supuesta compra de 200 millones de yenes en bitcoin, que un empresario envió a un monedero de los estafadores. Cuando entregaron los yenes en efectivo, la mayoría del dinero era falso.
Mientras tanto, en China sí ha habido grandes estafas vinculadas al mundo de las criptomoendas. Especialmente, si nos remitimos a esquemas fraudulentos como WoToken y PlusToken, que se encuentran entre las mayores estafas de bitcoin y otras criptomonedas de la historia.