La Guardia Civil, en colaboración con Europol y la policía colombiana, ha detenido en Madrid y Valladolid a ocho personas que presuntamente integraban una red internacional dedicada al blanqueo de capitales procedentes de otros grupos criminales y a cometer estafas con criptomonedas y le han bloqueado nueve inmuebles, bienes obtenidos de forma ilícita por valor de un millón de euros, y treinta cuentas bancarias, además de la incautación de cerca de 300.000 euros en metálico y “monederos” de criptomonedas en pendrives
La red desarticulada aparte del blanqueo de dinero llevaban a cabo una estafa masiva de criptomonedas
La investigación, desarrollada por la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, se inició cuando los agentes detectaron actividades vinculadas al blanqueo de capitales realizadas por un miembro de una organización dedicada al narcotráfico que se fue incrementando hasta convertirse en un referente al que se dirigía el dinero de distintos grupos delictivos asentados en España.
Uno de los principales métodos que utilizaban para el blanqueo eran las criptomonedas, unos activos que en un principio adquirían a diversos proveedores, pero que a base de estafas se convirtieron en su “mina de oro”, ya que la red logró convertirse en su propio suministrador de criptodivisas.
En concreto, cometieron estafas en España que alcanzaban cuantías de varios cientos de miles de euros.
Una vez que la red disponía de una gran cantidad de estos activos digitales ofrecía a terceras organizaciones la posibilidad de intercambiarlos por dinero en efectivo fruto de sus actividades delictivas.
El dinero estafado de sus víctimas lo volvían a intercambiar con otras organizaciones criminales.
Los investigados contaban con testaferros, así como con un circuito internacional bancario y de criptodivisas soportado sobre empresas pantalla ubicadas en España, Bélgica, Suecia, Alemania y Lituania.
Las personas que realizaban las estafas se jactaban de haberlas cometido sobre personas con dificultades económicas o incluso de avanzada edad.
En la investigación de esta red ha colaborado Europol, la Policía Nacional Colombiana y la DEA -administración de control de drogas- de Estados Unidos.